El nombre sánscrito del Séptimo chakra, el chakra de la coronilla, es SAHASRARA, significa “multiplicado por mil”.

El símbolo hindú de SAHASRARA. es un halo de mil pétalos blancos, sinónimo del infinito, cada uno de ellos sintonizado con los más elevados estados de conciencia.
Características del Séptimo chakra SAHASRARA
El chakra de La Corona amplia todavía más los conceptos introducidos en los chakras de la garganta y el tercer ojo: la comunicación y la interconexión con todas las cosas y todo el conocimiento.
Cuando despertamos el chakra de la corona, estamos abiertos a las posibilidades de la infinitud del espacio y el tiempo, y contamos con la comprensión y la sabiduría divinas que nos permitirán cosechar los beneficios.
El Sahasrara está vinculado elementalmente con la energía y el pensamiento cósmicos. Este nivel abandona el intelecto al poder de la experiencia apasionada y el “conocimiento”. No es de extrañar que los sabios hayan descrito este estado con los términos de bendición, embeleso y éxtasis: cuando la diosa Kundalini, tras haber despertado cada uno de los chakras, alcanza el más regio de todos.

Asociaciones del Séptimo chakra
La ubicación del Séptimo Chakra es en la Coronilla.
El color asociado es el blanco, dorado o violeta, el elemento asociado es la energía cósmica, el pensamiento y, el planeta dominante es Urano.
¿Cuáles son los arquetipos del Séptimo chakra?
Los arquetipos del Chakra de la coronilla son el Gurú y el Egocéntrico.
La perspectiva del mundo que tiene el egocéntrico es mecanicista, pues no tiene tiempo para nada que no se pueda explicar lógicamente. Por ello, no consigue extraer beneficios de todo lo que de misterioso e inexplicable hay en la vida.
A veces, cuando los atavíos del éxito, sobre todo el estatus en el trabajo, han desaparecido, los egocéntricos se ven obligados a enfrentarse a su bancarrota espiritual.
La autodeterminación y el rígido control de su propia vida hacen que los egocéntricos valoren el materialismo, para descubrir, cuando ya no tiene significado, que carecen de los recursos interiores necesarios para obtener más de la vida.