Esa frase tan popular, con la que me siento indignada, normalizada en esta sociedad en la que “siempre hay que estar con la vibra alta”, en la que no es posible sentir tristeza, dolor, enfado.. porque a ver si alguien se va a conectar con sus emociones y deja de tener el control de la situación… hoy vengo a decirte que UN CLAVO NO SACA A OTRO CLAVO.
Es sumamente importante permitirnos transitar los dolores de los duelos de la vida, tanto si fallece alguien cercano, como si se termina una relación importante para ti, como un cambio casa, de trabajo, de situación económica, o si estás dejando atrás partes de ti que ya no resuenan contigo…
Aunque nos contemos que “no es tan importante” o “estoy mejor así” o “he sido yo quien ha tomado la decisión”.. o un largo listado de justificaciones para no entrar en el dolor y continuar en esa huída hacia adelante.. sé muy bien de lo que te hablo, ha sido mi manera de sobrevivir durante años.. te digo que todo eso es PAN PARA HOY Y HAMBRE PARA MAÑANA.
Permitirnos el dolor de las pérdidas es la manera de aprender a vivir la nueva situación, desde el agradecimiento a lo que fue, desde el honrar esa situación, esa relación, valorando todo lo que nos aportó y nos ayudó a ser lo que somos ahora.. dale el espacio, eso va a generar el vacío fértil para que lo nuevo pueda aflorar desde un lugar sano, no para tapar el dolor, si no para generar más amor.
Cuídate mucho, déjate cuidar y respeta tus ritmos.
Te acompaño en tu proceso de duelo, de re-conexión con la vida, al permitirte conectar con lo que muere.
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Gracias por tu presencia.